Punto de encuentro

En un tiempo donde no abundan los soñadores, ni tampoco los locos cuerdos que quieran desfacer entuertos en nuestro mundo, Punto de Encuentro, quiere ser una instancia de diálogo para ayudar en la construcción de una sociedad más humana. Recordando al Quijote, ojalá hayan más que tomen su lanza y escudo para recuperar nuestra capacidad de soñar y de tomar el riesgo de la aventura.

martes, enero 30, 2007

Centran el área del cerebro que nos define como altruistas o egoístas

PD / BBCUNDO)-. Un equipo de científicos estadounidenses dice haber identificado la zona del cerebro que predice si seremos altruistas o egoístas. Según la investigación llevada a cabo en el Centro Médico de la Universidad Duke, la zona relacionada con el altruismo es la llamada sulcus posterior superior temporal.

En el estudio, publicado en la revista Nature Neuroscience, los investigadores monitorearon los cerebros de 45. Los científicos lograron categorizar a los participantes como más o menos altruistas, basándose en sus respuestas a las preguntas sobre cúan a menudo se comprometían en ayudar a otros.
Después compararon los escáneres con los resultados de sus conductas altruistas. Según los científicos, los escáneres mostraron que el aumento en la actividad del sulcus posterior superior temporal predice "vigorosamente" la probabilidad de que una persona sea altruista.
Los resultados, dicen los investigadores, indican que la conducta altruista podría originarse en la forma cómo la gente percibe el mundo, más que en la forma cómo actúa en éste.

APLICACIONES
Según los científicos, el estudio podría tener implicaciones importantes para el entendimiento de enfermedades como el autismo, además de comprender muchos aspectos de las relaciones sociales. Para los expertos

Durante mucho tiempo se ha intentado comprender por qué existe la cooperación entre los seres humanos, aún cuando esa cooperación no dé una recompensa directa o inmediata.

Y se ha pensado que el altruismo está relacionado a la capacidad del individuo de percibir el mundo y la capacidad de poder percibir la mente del prójimo, el llamado cerebro social.
Por eso mismo, los especialistas también creen que este estudio podría eventualmente ayudar a entender desórdenes como el autismo o la esquizofrenia, en las cuales hay un déficit de la capacidad del individuo para percibir al prójimo.

Fuente: El Periodista Digital